Efecto rebote

Publicado el 16 de octubre de 2024, 16:58

Siguiendo un poco con el tema anterior acerca de los problemas de alimentación, quiero hablar de las dietas y productos milagro, y su consecuente efecto rebote. Todo el mundo busca adelgazar rápido y en poco tiempo. A día de hoy, tienes una boda la semana que viene y empiezas a hacer en una semana lo que no has hecho en años. 

La rapidez de conseguirlo todo hoy en día sin poner por delante la paciencia y el trabajo constante está presente en el día a día de cada vez más personas. Los mercados lanzan a la venta productos que despierten el interés de los compradores y consumidores. Un producto que te promete quemar grasa o adelgazar en 1 semana y una persona que busca bajar de peso rápido es la combinación perfecta para acabar comprando ese producto y consumirlo. Entre ese proceso de querer bajar de peso y comprar el producto no se pone por delante la razón, la lógica y los efectos que puede tener en el cuerpo. ¿Has pensado cómo puede reaccionar tu cuerpo si en una semana bajas 7 kg y luego vuelves a la normalidad comiendo como siempre?

Una bajada de peso, para empezar, se hace de manera progresiva y controlada. Tienes que saber cómo hacerlo para no dañar tu cuerpo. ¿Y por qué te digo esto? Porque en el momento en el que buscas una bajada de peso rápida vas a someter a tu cuerpo a condiciones extremas donde puede producir daños. Piensa. Si a una planta le pones agua todos los días y de la nada te descuidas y dejas de ponerle agua porque estás muy liado con otras cosas... al cabo de unos días la planta empieza a secarse. Empiezas de nuevo a echarle agua, ¿ha recuperado su color y ya no está seca? No, pasan unos días hasta que se vuelve a recuperar y algunas hojas se quedan secas y ya no se recuperan. Pues algo parecido pasa en nuestro cuerpo.

Cuando nos sometemos a dietas restrictivas o a consumir productos "milagrosos" y empezamos a comer con normalidad... nos enfrentamos al efecto rebote. El efecto rebote se produce cuando restringimos la alimentación durante un tiempo y volvemos a alimentarnos con normalidad. ¿Efectos que se producen? Subida de peso rápida, te sientes fatigada y cansada, el metabolismo se ralentiza, el aparato digestivo se daña por el brusco cambio de la ingesta de alimentos... por no decir que vas a tener muchas más ganas de comer debido a la restricción.

Conseguir con rapidez lo que queremos sin aplicar esfuerzo y paciencia tiene sus consecuencias. Y en este caso, la consecuencia la pagamos con la salud.

Lo que te venden para conseguir una bajada rápida de peso, es algo de lo que no debes fiarte. Recuerda siempre acudir a un nutricionista para acertar correctamente en el progreso de tus objetivos. 


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